12/12/13

TU OES Y EL NACIMIENTO DE UN BEBÉ, QUÉ HACER?


Muchas personas creen que el tener perros y el nacimiento del bebé es un hecho incompatible, poco higiénico, y que requiere de medidas drásticas.


¿Hemos de deshacernos del perro porque vayamos a tener un bebé?


No dejes que nadie te “coma el coco” diciéndote que has de desprenderte de tu perro por el hecho de que vas a tener un hijo. ¿Acaso te desprenderías de un hijo al saber que va a tener un hermanito? Un perro es un animal, no una persona, pero siente y padece tanto como nosotros. Además, él estaba primero, y lo cogiste porque quisiste. ¡Por favor, sé responsable!
Además, recuerda que la sana costumbre de criar a los niños en contacto con los animales se ha practicado durante miles de años, antes de que a nuestra “moderna” sociedad le entraran un montón de miedos: a las bacterias, al polvo, a los perros y, en definitiva, a elementos de la naturaleza que siempre han estado en contacto con nosotros pero que ahora, de repente, hemos decidido que no toleramos
De hecho esa intolerancia es una de las principales causas del brutal incremento de alergias que padecemos hoy en día. Con los síntomas alérgicos nuestro cuerpo nos indica que nos hemos apartado demasiado de la naturaleza. La alergia se produce cuando nuestro sistema inmunitario reacciona con excesiva violencia ante estímulos que antes, cuando teníamos menos manías, no nos hacían daño. No cometas ese error. Tu perro será un compañero de juegos perfecto para tu hijo así que tener perros y el nacimiento del bebé no debería de ser, salvo excepciones, un problema.

Aplica ya los cambios durante el embarazo


Procura informarte de todos los cambios que van a producirse con el nacimiento del bebé (horarios, distribución de habitaciones, etc.) y ves aplicándolos ya durante el embarazo, para que el perro se vaya acostumbrando a la rutina que llevarás cuando tengas a tu hijo.
Una de las cosas que seguro sucederán es que podrás dedicarle menos tiempo. Por lo tanto, reduce el nivel de mimos hacia el perro y ves acostumbrándolo a paseos algo más cortos (sin que disminuya la calidad de vida del animal). No le saludes al entrar en casa, pues eso fomenta su dependencia (es un momento en el que te está pidiendo atención)
Piensa que cuando llegues con el niño a casa por primera vez o, más adelante, cuando llegues de pasear a tu hijo, no podrás saludar a tu perro. Mejor que le acostumbres ahora a no recibir los mimos nada más llegar tú a casa. Así no asociará ese cambio de actitud con el nacimiento del bebé, lo cual podría provocar celos.

Cuando vaya por la calle que aprenda ya a no tirar de la correa


Si tu perro no está educado para caminar por la calle sin tirar de la correa, piensa que cuando vayas con él y con el carrito del niño será una odisea. Asimismo, si en algún momento ha tenido el más mínimo signo de agresividad hacia niños o hacia vosotros (os ladra o gruñe cuando le reñís, cuando le quitáis algo que ha cogido, muestra celos hacia otra mascota o hacia algún miembro de la familia, etc.) es extremadamente urgente que soluciones el problema de su educación antes del nacimiento del bebé. No lo sigas postergando.

Adiestramiento antes del nacimiento del bebé


Llama inmediatamente a un adiestrador para tener a tu mascota educada antes de que llegue el 6º mes de embarazo. Con un buen adiestramiento, que también incluya terapias emocionales (sin medicación) para tu mascota, se pueden solucionar totalmente incluso casos de agresividad, pero no esperes al nacimiento del bebé, ya que entonces el adiestramiento de tu perro estará mucho más limitado.
Esto sucede porque al adiestrar a un perro agresivo le obligamos a someterse a los dueños en vez de que continúe mandando él, pero si hay un miembro de la familia (en este caso el bebé) que no puede ganarse el respeto del perro por sí mismo, el adiestramiento puede ser contraproducente, ya que el perro puede pagar con el niño su frustración y su mal genio durante el proceso educativo.
¡No te asustes! Incluso en esos casos una buena terapia emocional puede bajarle la agresividad lo suficiente como para que podamos adiestrarlo. Pero tendríamos que renunciar al orden óptimo de trabajo (adiestrarlo al mismo tiempo que se empieza la terapia emocional)
Por lo tanto, si todavía no has educado a tu mascota, ahora se hace imprescindible que lo hagas. Así cuando llegue el bebé podrás disfrutar de él… y de tu perro bien educado.

Cuando el niño acabe de nacer


Mientras estáis en el hospital, es importante que le hagáis llegar al perro pañales y ropa usada por el niño, para que pueda olerlos y familiarizarse con el nuevo miembro de la familia antes de su llegada a casa.

Cuando llevamos el niño a casa por primera vez


Después del nacimiento del bebé, cuando tu pareja y tú lleguéis a casa con el niño, es conveniente que el padre entre delante de la madre, que es la que lleva el niño en brazos. Es mejor si ya habéis acostumbrado a vuestro perro a no recibir saludos en cuanto llegáis a casa.
Pero si no es así, el padre tendrá que saludar primero al perro, intentando calmarlo. Luego la madre ha de entrar con el niño y sentarse en el sofá, para poner al niño al alcance del perro.
Deja que el perro huela a tu hijo con toda naturalidad. Lo único que debes evitar, por higiene, es que le lama la cara. Mientras huele al niño, acaríciale, para que asocie la llegada del niño a un momento agradable y sepa que tu hijo no va a suponer para él un rival a la hora de conseguir caricias.

Cuando empieces a educar a tu hijo


Procura no reñir al niño a gritos, y mucho menos delante del perro. Tu mascota podría sentir la tentación de apoyarte en tu condición de líder de la manada y “reñir” él también al niño. Además has de recordar que los perros son extremadamente sensibles a las energías que hay en su ambiente.
Si en casa proliferan el ruido, los gritos, los llantos, etc. tu mascota será la primera en estresarse. Procurad mantener entre todos un ambiente de calma y armonía en casa, del cual pueda beneficiarse toda la familia.

¿Sabias que…?


Los perros tienen un olfato 20 veces superior al nuestro, con lo que pueden detectar que una mujer está embarazada bastante antes de que ella misma lo sepa, ya que huelen las sustancias que, desde el momento mismo de la concepción, se segregan en la sangre de la embarazada.
Se han dado casos de perros que siempre se habían subido encima de su dueña para saludarla y que, de repente, dejan de hacerlo. Tiempo después la mujer se entera de que está embarazada.
Es curioso como desde mucho antes del nacimiento del bebé el perro ya percibe los cambios en el hogar.


Especialista en educación de perros y gatos. Creadora del Adiestramiento Emocional. Terapias naturales. Reside en Barcelona (España).

9/12/13

CÓMO SER EL LÍDER DE TU OES?



Los perros como grupo y como individuos necesitan tener y seguir a un líder. El dueño de un OES debe ser ese líder del grupo y ambos necesitan conocer sus roles. 


Cerca de los seis meses de la edad, la mayoría de los OES han alcanzado una etapa adolescente torpe (algunos OES no alcanzan esta etapa hasta su segundo año.) En esta etapa, todo lo que usted le ha enseñado a su cachorro parece haber sido olvidado: Él ni siquiera piensa en obedecer las órdenes más sencillas como el sentarse o ir cuando se lo llama. 

Durante este tiempo, el perro joven desea probar a su grupo y a sus líderes, para ver si él puede asumir el control como jefe. Usted tiene que hacer un gran esfuerzo para poner a su perro joven en su lugar. Tiene que esforzarse en hacer los ejercicios de dominancia con la ayuda de un Médico Veterinario especializado en Comportamiento animal. 

Recuerde que el mejor premio es alabarlo cuando hace las cosas bien y no recompensarlo con comida.  

Un perro cuenta con una jerarquía dentro de la familia, como lo haría dentro de un grupo de perros. Suprima las primeras muestras de agresión con medidas convenientes tan pronto como se manifiesten. Aunque puede ser que se divierta viendo cómo su perrito defiende su hueso, no tolere este comportamiento. Cuando el perro sea varios meses mayor, tal vez sea demasiado tarde. 

Puede ser muy trabajoso y costoso tratar luego el comportamiento agresivo, y puede ser incluso muy peligroso para usted si tiene un perro de tamaño grande.

Hay algunas cosas que usted puede hacer para reforzar su posición como el líder de su perro: 

Enséñele y realice ejercicios de dominancia con él. Háblele en un tono reconfortante durante el tiempo que estén juntos. Agarrar la boca del perro con su mano, cuidadosamente, es también un gesto de dominación que el cachorro entenderá y servirá para consolidar una posición dominante sobre su perro. 

Debe ser claro para todos los miembros de la familia que el perro es el último en la jerarquía de la familia. 

Usted nunca debe tolerar el comportamiento de monta, particularmente con los niños. 

Dígale NO con una voz severa y cortante, pero sin gritar. 

Comience estas medidas lo antes posible, en cuanto el cachorro llegue a su hogar.

Es mucho más difícil corregir un mal comportamiento existente que prevenirlo desde el principio. 

Los perros que no son ubicados en su lugar desde el principio pueden ser un problema verdadero una vez que se hacen adultos (uno o dos años de edad), especialmente si son machos. 

La manera de mantener a los perros en su lugar sometiéndolos por la fuerza bruta ha pasado de moda, afortunadamente. 

No le haga caso a charlatanes que le propongan pegarle o “rigorear” a su animal. Los perros que son sometidos con violencia desde cachorros tienden a ser ansiosos y pueden comenzar a morder por miedo y además pierden confianza en la gente.  Recuerde que los perros en general y los machos en especial suelen confundir los gestos de cariño físico con gestos de subordinación de sus propietarios para con él. No se exceda en demostraciones de afecto típicamente humanas.

Usted logrará más con consistencia, recompensa, afecto y firmeza. Recuerde la regla de las 3 P (Paciencia, Perseverancia y Práctica)

Recuerde también que no es justo que el perro sea el único que tenga que aprender, las personas con las que convive también deben aprender a comportarse como corresponde para con él. 

Usted debe comportarse como corresponde a un individuo perteneciente a la especie que se halla en la cima de la escala zoológica. 






Sobre el artículo de :
Dr. Ricardo Luis Bruno
Médico Veterinario - UBA – MP 6170 
Especialista en Comportamiento  Animal 

5/12/13

EL CRECIMIENTO DE LOS PERROS DE RAZAS GRANDES



En comparación con otras especies animales y el hombre, el proceso de crecimiento de los perros experimenta cambios importantes en un periodo de tiempo relativamente corto. Especialmente en las razas grandes, el crecimiento en longitud (crecimiento de los huesos largos) es espectacular. A la edad de 16-18 meses, este tipo de perros ya ha alcanzado su tamaño corporal final (no el peso).

Cartílago de crecimiento

El crecimiento longitudinal de los huesos tiene lugar en los cartílagos de crecimiento. Los huesos no crecen al azar, sino únicamente en los cartílagos de crecimiento que están situados en los extremos de los huesos. Durante el proceso de crecimiento, el cartílago se mineraliza y se transforma en hueso. Este proceso continúa hasta que el hueso ha alcanzado su longitud final.

Las posibles alteraciones en este proceso pueden conducir a enfermedades del esqueleto que ocasionan cojera y malformaciones óseas. Las articulaciones del hombro y del codo suelen ser las mas frecuentemente afectadas. La rótula (rodilla), el jarrete (tobillo) y la articulación de la cadera también pueden verse afectadas.

Problemas del esqueleto

La investigación con perros de razas grandes en Suecia, Estados Unidos, Alemania, Australia y los Países Bajos, ha demostrado que estas enfermedades se deben al desarrollo anormal del cartílago de las articulaciones. En el perro, la enfermedad se conoce con el nombre de Osteocondrosis (OC) u Osteocondritis Disecante (OCD). Por otra parte, la sobrecarga de las articulaciones como consecuencia del exceso de peso también puede ocasionar problemas, siendo el ejemplo mas obvio la Displasia de Cadera (Hip Dysplasia - HD).

La Osteocondrosis (OC) y la Displasia de Cadera (HD) son enfermedades que se desarrollan durante el crecimiento. Son enfermedades hereditarias por naturaleza y pueden verse afectadas por condiciones ambientales tales como el trauma. La HD se caracteriza por un mal ajuste de la cadera, ya sea a causa de la conformación de la apófisis, de la fosa o de ambos. Si un perro no presenta HD cuando su esqueleto ha madurado, nunca la sufrirá. En caso de que el animal padezca HD pero no se le haya diagnosticado cuando era un cachorro, se le puede diagnosticar después en base a la artrosis subsecuente. Esto mismo se aplica a la ODC.

Varios estudios han demostrado (excluyendo las influencias genéticas) que el relativo exceso de peso por sobrealimentación de los cachorros en la etapa de crecimiento (el cachorro pesa demasiado para su edad en función del tamaño) conlleva un aumento significativo de la HD clínica. Los beneficios de criar un cachorro relativamente delgado son importantes, y desde el punto de vista de la ortopedia es preferible un cachorro delgado a uno obeso. Un exceso de peso origina una deformación de la articulación de la cadera (de hecho aumenta el riesgo de incidencia de HD). El tamaño total (altura hasta el hombro) no se ve afectado por alimentar a un cachorro de modo que se mantenga delgado. El cachorro no crece más despacio en cuanto a la talla sino en cuanto al peso corporal, lo cual es preferible.

El riesgo de una ingesta excesiva de calcio

El calcio es necesario para el desarrollo de un tejido óseo saludable. Extensas investigaciones han demostrado que la ingesta de calcio constituye el principal factor de riesgo para el desarrollo de la OCD. Cuando la ingesta de calcio es demasiado alta, aumenta el riesgo de que el perro desarrolle problemas clínicos. Puede producirse una ingesta excesiva de calcio cuando se añaden suplementos cálcicos a una alimentación completa y equilibrada, cuando se alimenta al animal con una comida completa con alto contenido de calcio, o cuando el dueño añade demasiado calcio a la comida "casera". Bajo cualquier circunstancia, debe evitarse el añadir calcio a una dieta completa y equilibrada. La cantidad de calcio incluida en estas dietas ha sido cuidadosamente controlada.

El peligro de una ingesta energética excesiva

El desarrollo de la Displasia de Cadera (HD) no guarda relación con el crecimiento longitudinal de los huesos, pero sí se ve muy influido por la nutrición. Una ingesta excesiva de alimento (calorías) durante el crecimiento conlleva un aumento del riesgo de desarrollar HD. El mecanismo por el que se produce este aumento del riesgo parece deberse al rápido aumento de peso y a un esqueleto relativamente inmaduro como para soportar ese peso corporal.

Al nacer, el esqueleto es fundamentalmente cartilaginoso, y se transforma en hueso de forma gradual. A diferencia del hueso, el cartílago es flexible y puede cambiar de forma, y de hecho lo hará si se le somete a fuerzas de carga. Cuando el esqueleto inmaduro, y por lo tanto la articulación inmadura de la cadera del perro, se "sobrecarga" debido al exceso de peso (para su edad), existe el riesgo de que la forma de las articulaciones de su cadera se adapten y se vuelvan displásicas.

No obstante, la Displasia de Cadera es una enfermedad hereditaria, y cuando los genes no se encuentran en la línea genética de la raza, independientemente de la edad, un exceso de peso corporal nunca dará lugar a la aparición de HD. Por otro lado, se ha demostrado que cuando en la línea genética existe riesgo de HD, la sobrealimentación del cachorro aumenta de forma dramática la frecuencia y gravedad del problema.

Esto mismo puede aplicarse al riesgo relativo de Osteocondritis Disecante y al conjunto de trastornos conocido como Displasia del codo (Elbow Dysplasia - ED). Un incremento de peso corporal demasiado rápido aumenta el riesgo de aparición de dichos trastornos. Para obtener el mejor resultado final -un perro sano y de la talla apropiada-, es necesario que tenga lugar un crecimiento equilibrado junto con una tasa de aumento de peso corporal controlada. La administración de la cantidad correcta de alimento garantiza que el perro alcance su correspondiente talla adulta final y un estado de salud óptimos.

La cantidad de proteínas no influye

La investigación del crecimiento del Gran Danés (Nap RC, Países Bajos), ha demostrado que el nivel de proteínas de la dieta no influye de manera significativa en el desarrollo del esqueleto. Una ingesta elevada de proteínas no aumenta el riesgo de Osteocondritis Disecante o de Displasia de Cadera  y no tiene ningún efecto sobre el crecimiento longitudinal del hueso.

Nutrición especial para el crecimiento

Pese a la elevada frecuencia de problemas óseos en los perros de raza grande, la buena noticia es que existen alimentos especialmente formulados para satisfacer las necesidades derivadas del rápido crecimiento de los cachorros de razas grandes. Este alimento tiene en cuenta las investigaciones más recientes que consideran al calcio como el principal factor de riesgo en la alimentación de razas grandes, y que también recomiendan una reducción de la ingesta energética total para conseguir un crecimiento controlado. Eukanuba Puppy & Junior Razas Grandes está especialmente formulado para conseguir un bajo contenido energético y una relación Calcio: Energía ajustada para favorecer un crecimiento saludable. ¡Proporciona un soporte nutricional óptimo a todos los cachorros de razas grandes.




Acerca del Pet Food Institute

El Pet Food Institute es la cámara de fabricantes de alimento balanceado de los Estados Unidos. Sus acciones promueven la investigación y el desarrollo de la industria, a favor de los animales domésticos. Desde febrero de 1998 realiza actividades en Argentina para concientizar sobre la importancia de cuidar y respetar a las mascotas domésticas.

Agradecemos la colaboración para la publicación de esta nota a:

Burson-Marsteller - Maria Isina Areco


- See more at: http://www.foyel.com/paginas/2009/12/1102/el_crecimiento_de_los_perros_de_razas_grandes/#sthash.vBGZtij5.dpuf

2/12/13

TU OES Y LAS FIESTAS



La reacción de los "animales humanos" ante determinados estímulos externos no es igual, ni tiene por qué serlo, a la que tienen los "animales no-humanos". Este punto cobra especial importancia cuando los humanos realizamos actividades festivas.

No podemos, ni debemos, esperar o forzar una respuesta de nuestros animales que a nosotros nos convenga por cómoda, o simplemente por desconocimiento. La psicología animal es bastante más compleja de lo que el gran público supone, y requiere en algunos casos unas precauciones concretas, cuando no una cierta previsión. Además, hay algunos tipos de fiestas que, sin ser directamente estresantes para ellos, sí que los colocan en una posición de riesgo.

 Estamos ante un ejemplo de cómo nuestras celebraciones pueden suponer para los animales momentos de pánico y de estrés, por lo que es importante ser un dueño responsable y preparar a nuestros animales antes de que en la zona empiecen a lanzarse petardos y cohetes. Recuerda que son centenares los animales que escapan presa del pánico y se pierden, y no siempre los encontramos: pueden resultar herido o muertos por un vehículo, robados, ir a parar a un centro en el que los sacrifiquen, etc.

Además, recuerda también que su oído es mucho más sensible que el nuestro, por lo que el nivel de sonido para ellos es mucho mayor, y podrían llegar a sufrir problemas de tímpano.


  • Mantenlo dentro de casa, sobre todo si no vas a estar.
  • Si está atado fuera, no lo pierdas de vista (puede ahorcarse)
  • Déjalo cerrado en una habitación en la que se sienta seguro y cómodo, ponle música clásica, y déjale sus juguetes favoritos y algo de ropa con tu olor, además de abundante agua.
  • Procura que una hora antes del comienzo haga mucho ejercicio, y luego dale una cena sabrosa y abundante. Se quedará relajado.

Cuando lo saques a la calle:

  • Elige la hora menos conflictiva
  • Llévalo atado (aunque te obedezca mucho)
  • Ante eventuales tirones por ataque de pánico, comprueba que el collar no se le saldrá y que la correa está bien.
  • Evita las zonas en las que haya gente tirando petardos
  • Cada año recibimos llamadas de personas que han perdido su perro por los petardos. La mayoría iban sueltos por la calle porque obedecían mucho, o estaban en un jardín sueltos y sin vigilar.

Desensibilizarlos

No todos los animales de compañía manifiestan miedo a los cohetes y petardos. Los etólogos consideran cuando los perros que tienen miedo a los fuegos artificiales es porque el sonido es extremo y porque no están acostumbrados a él. Pero muchas veces esto puede arreglarse mediante un entrenamiento de desensibilización, tanto en perros adultos como en cachorros.

Si cada vez que el animal siente miedo por este motivo vas a abrazarlo o a tranquilizarlo, estás reforzando su idea de que algo horroroso ocurre, y todo irá a peor.

El proceso de desensibilización consiste en irlo acostumbrando poco a poco, y hay que empezar despacio. Elige un CD con efectos de sonido (tormentas, petardos, etc.) y pónlo a volumen bajo. Ve subiendo muy despacio hasta que notes una reacción en el perro, por ejemplo que endereza las orejas. Déjalo a ese volumen durante un cuarto de hora más o menos, mientras atraes su atención, juegas a algo con él y actúas con absoluta normalidad

Sobre todo no le digas ninguna palabra tranquilizadora de las que uses habitualmente. El mensaje que tiene que llegarle es "no pasa nada, ¿por qué te pones nervioso? no entiendo qué te pasa". Sal de la habitación unos minutos, y vuelve a entrar como si nada.

Repite cada día subiendo el volumen despacio de un día para otro. Piensa que el proceso puede ser largo según el nivel de pánico de tu perro, y que una vez superado quizá requiera sesiones "de recuerdo" de vez en cuando.

Por desgracia, hay animales que padecen esta fobia de manera desorbitada, y no parece haber nada adecuado para que entiendan que no hay peligro. En este caso, y en otros que consideres necesario, habla con tu veterinario que te aconsejará si el animal necesita algún tranquilizante y cual.

NO LE DES NADA POR RECOMENDACIÓN DE AMIGOS O PARIENTES: HABLA CON TU VETERINARIO.