13/12/16

LA ACUPUNTURA EN LOS PERROS



Acupuntura Veterinaria

Hasta no hace mucho tiempo, el tratamiento de las enfermedades degenerativas crónicas o productoras del dolor crónico eran de escasa frecuencia de tratamiento. Ya sea por factores económicos, por baja o nula convivencia con el paciente o por falta de preocupación o desconocimiento por el sufrimiento de las mascotas. Para estos casos, la solución más común para estas patologías era la eutanasia.
Los avances en la nutrición y de la Geriatría en Medicina Veterinaria hicieron que las mascotas vivieran muchos más años, por lo tanto los estados geriátricos debilitantes no se presentan en calidad y en cantidad como años atrás.
Así como también en los animales jóvenes traumatizados, con degeneraciones neurológicas, disfunciones fisiológicas o con deformaciones congénitas que puedan causar dolor agudo o crónico, no siempre pueden ser tratadas satisfactoriamente con procedimientos quirúrgicos y/o medicamentosos de actualidad.
Para este tipo de situaciones es que surge la Acupuntura, como una eficaz forma de tratamiento.

¿Qué es la Acupuntura?


Se puede definir a la Acupuntura (acus = aguja y punctura = punción), como la inserción de agujas muy finas en puntos preestablecidos específicamente (llamados meridianos) sobre el cuerpo del individuo a curar, para producir una determinada reacción fisiológica.
La Medicina Veterinaria ha listado 32 puntos simples y 40 bilaterales, o sea 112 puntos seleccionados posibles de ser usados en Pequeños Animales. Cada punto de acupuntura tiene una o varias funciones cuando es estimulado. Al combinarse con otros puntos se producen resultados que modifican la acción del órgano a tratar. Pero la inadecuada selección de los acupuntos puede anular o exacerbar los síntomas clínicos a tratar.

Historia de la acupuntura en Medicina Veterinaria

La acupuntura es una de las técnicas médicas curativas más antiguas que existen en el mundo, y la acupuntura veterinaria probablemente sea casi tan antigua como la acupuntura Humana. Se cree que una terapia similar existió en la India hace unos 7000 años.
El primer practicante en veterinaria del que se tienen registros se llamó Shun Yong. El vivió en los años 480 antes de Cristo, y es considerado como el padre de la profesión.
En esos tiempos la acupuntura era usada en caballos, los cuales eran estimulados con pequeñas flechas antes de cada batalla. Los veterinarios también trataban vacas, cerdos y aves.
Japón también tiene antecedentes registrados sobre la Acupuntura Veterinaria hacia fines de los años 1800, momento en que fue introducida la Medicina Occidental.
En Francia, la acupuntura veterinaria es utilizada desde fines del siglo XVIII y comienzos del siglo XIX, tomando nuevo auge en los últimos 30 años.
En Oriente, la acupuntura fue utilizada como modalidad profiláctica y terapéutica durante varios miles de años. En esos tiempos se usaban agujas de piedra y espinas de pescado. Luego de la Edad de Piedra, se emplearon agujas de Bambú, Jade, Cobre, Hierro, Oro o Plata. En la actualidad la agujas de acupuntura son de Acero Inoxidable y/o combinaciones de otros metales de aleación.
Muchos son los libros que se han escrito sobre esta ciencia y en ellos se han descripto los mecanismos fisiológicos, anatómicos, patológicos, diagnósticos y de tratamiento de las enfermedades que ocurrían en esos tiempos.
La Medicina Tradicional China clasificaba a los profesionales médicos en cuatro disciplinas diferentes, a saber:
  • Médicos
  • Cirujanos
  • Veterinarios
  • Dietistas
A menudo su práctica se entrecruzaba o superponía, de modo que una sola persona ejercía una o más disciplinas. Hasta que las filosofías médicas occidentales fueron introducidas durante la Dinastía Ching (1644 – 1911), la Medicina Tradicional China fue la forma exclusiva de terapia practicada en ese país.
Meridiano de Pulmón - cara interna
Meridiano de Pulmón – cara interna
Dentro de la Medicina Tradicional China se encontraban incluidas diferentes técnicas, que sin ser ejercidas solamente a través de agujas podían promover los mismos efectos que la acupuntura. Esto se debe a que poseen el mismo fundamento.
Estas técnicas consistían en:
  • Acupuntura
  • Moxibustión (aplicación de calor en los puntos de acupuntura a través de la combustión de una hierba llamada Artemisa vulgaris modelada en forma de cigarro)
  • Terapia manipulativa o masaje
  • Ejercicios respiratorios (conocido en la actualidad como Chi-Gung)
  • Nutrición y dieta
  • Medicina por Hierbas (denominada comúnmente Fitoterapia)
En 1929, la creciente popularidad e influencia de la medicina clínica y quirúrgica occidental dentro de China produjo que el gobierno proscribiera la práctica de la Medicina Tradicional China. Esta prohibición fue ignorada por la población y produce que la Medicina Tradicional China pase a practicarse en la clandestinidad.
Todo en la vida tiene su ida y vuelta, y esta disciplina no podía quedar excluída de esta regla. Hacia fines de la década de 1940, y gracias a la ayuda prestada por sus practicantes al Ejército Rojo, Mao Tse Tung imparte órdenes para que la medicina antigua (Oriental) y la medicina moderna (Occidental) recibiesen un trato igualitario en la educación, investigación y práctica.
En la actualidad, los centros de investigación en Acupuntura más relevantes están en China, Taiwan, Rusia, Bélgica, República Checa, Italia, Rumania, Francia, Alemania, Japón, Corea del Sur, Portugal, Suiza, EEUU y Canadá.
En 1979 la Organización Mundial para la Salud publicó sus observaciones sobre la Acupuntura después del Seminario Inter-regional llevado a cabo en Beijing. Así fue que la Organización Mundial para la Salud concluyó que “… el claro peso de las evidencias demandan que la acupuntura sea considerada seriamente como un procedimiento clínico de valor sustancial

Aplicaciones de la Acupuntura

Las aplicaciones más comunes en Medicina Veterinaria son:
  • Alivio del dolor
  • Parálisis y Paresias de los miembros posteriores
  • Afecciones motoras de los miembros anteriores
  • Inducción de respuestas nerviosas autonómicas
  • Analgesia en del dolor agudo y crónico
  • Patologías dérmicas
  • Patologías del tracto gastrointestinal
  • Afecciones músculo – esqueléticas degenerativas o seniles
  • Afecciones de columna vertebral
  • Síndromes de malabsorción y/o malasimilativo


Adriana Inés Moirón
Doctora en Medicina Veterinaria. Se desempeña como docente en la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional de Buenos Aires, y en el Instituto Médico Argentino de Acupuntura. Además, es Directora del Laboratorio Clínico Veterinario Alem, en la ciudad de Buenos Aires (Argentina).

22/9/16

7 COSAS QUE MI PERRO ME ENSEÑÓ


7 cosas que mi perro me enseñó
Vivir con un perro te cambia la vida. No solo es una gran responsabilidad, sino que es una fuente inagotable de enseñanza y bienestar. Haber compartido gran parte de mi vida con animales me ha hecho inmensamente feliz pero además me ha aportado innumerables beneficios.
Cada día es una aventura y no hay un solo instante en el que estando con él te sientas sola. Así, si me acompañáis, a continuación os cuento 7 cosas que mi perro me enseñó:
Algunos ángeles no tienen alas. Tiene 4 patas, un cuerpo peludo, nariz de pelotita, orejas de atención y un amor incondicional.

1-A amar sin condiciones

Mi perro me enseñó el valor del compromiso y de la reciprocidad. Gracias a mi perro aprendí el valor de la lealtad, que es inmensa.  Y el amor incondicional, el amor de pase lo que pase y el amor de “te quiero siempre a mi lado porque contigo mi vida es infinitamente mejor”.
En realidad mi perro cada día me enseña a no enfadarme. La vida no es de color de rosa y eso mi perro lo sabe; sin embargo, es capaz de perdonar cualquier fechoría o cualquier salida de tono y seguir hacia adelante, porque hay un lazo mucho más grande que nos une para siempre.
Él me comprende y conoce el valor de no tener segundas intenciones, mi perro posee una absoluta bondad y pureza.

3-A vivir cada momento intensamente

Mi perro disfruta de un paseo, de un rato de juego o de una comida como si fuese la primera o la última de su vida.  Él también tiene sus ansiedades y sus preocupaciones pero todo le hace disfrutar y procura vivirlo intensamente. Es algo así como el “carpe diem perruno”.
Además, cada día se reservan un rato para explorar y ejercitarse, no pasan un día entero sin hacerlo aunque solo sea un poquito. En cuanto al paseo, le da igual a donde ir, él es feliz por acompañarme y sabe valorar esos momentos. No hay nada para hacerme sonreír como ver lo contento que se pone porque sale a pasear.

4-A adorar el caos

Adoro su desorden ordenado. En medio del caos de juguetes y huesos entre las diferentes habitaciones de la casa él sabe donde tiene lo que quiere y lo que le apetece en todo momento.
No hay razón para perder el tiempo en organizar sus cosas ni en establecer prioridades: mi perro es feliz con lo mucho o poco que tenga, recuerda que lo tiene y sabe disfrutarlo. Si yo comienzo a recoger sus juguetes para llevarlos a su cuna me persigue por toda la casa para asegurarse de tenerlo todo controlado. Y lo más asombroso es que lo consigue. Ojalá fuese capaz de llevar mi vida tan organizada sin preocuparme por el orden constantemente. 

5-A disfrutar de los pequeños placeres de la vida

Escuchar su respiración sosegada en la noche me produce una paz indescriptible. Se tumba cerca de mí y se siente seguro y amado. Tanto como yo a su lado. Me resulta tan delicioso escucharle como atender a la brisa del mar o al cantar de los pajarillos.
niño con su perro disfrutando de su infancia

6- A comunicarme con mi cuerpo

Puede que él no entienda lo que yo le estoy  diciendo pero sabe por mis gestos o la forma en la que posiciono mi cuerpo hacia él cuál es mi estado emocional o si le quiero decir algo. Ambos nos hemos vuelto muy habilidosos para comprendernos y no hay nada que se nos resista. Los animales son verdaderos detectores de emociones.
Es muy común que los que han compartido su vida con un animal hayan tenido la sensación de que en verdad parece que entienden lo que les decimos. Es cierto, lo hacen.., no sé si por lo que decimos o por cómo lo decimos pero nuestra capacidad de comunicación y de intercambio llega a ser alucinante. Realmente esto me ha hecho consciente de lo que puedo llegar a transmitir.

7- A sentirme única e irremplazable 

Un perro te enseña cientos de cosas, te da lo que necesites y te seguirá toda la vida. Pero lo que un animal te va a enseñar es a quererte y a aceptar el hecho de ser una persona merecedora de amor.
Mi perro me ha hecho mejor persona y sé que seguirá haciéndolo cada día. Me ha enseñado que puedo ser amada con gran intensidad y de forma incondicional. Pero además me ha enseñado el valor de decir te quiero cada día y, además, decirlo sin palabras.
 por 
Raquel Aldana

https://lamenteesmaravillosa.com/7-cosas-perro-me-enseno/

12/9/16

QUE DEJA UN PERRO CUANDO SE VA???



Los seres humanos se van y dejan kilos de ropa (muchos más que siete). Se van y dejan joyas, colecciones de libros, coches y, a veces, casas. Dejan cuentas de twiter, correos electrónicos, páginas de facebook: corolarios de identidades hechizas, rastros del disfraz. Se van y dejan un trabajo, una cama, dinero en el banco. Los perros se van y aparentemente no dejan nada. Dejan, acaso, lo que nosotros les dimos: las casitas en las que dormían, las pelotas que correteaban, los huesos que mordían. Dejan las impresiones que tomamos de ellos: sus cuerpos cachorros decoran nuestros álbumes, esperan en los vericuetos de nuestros discos duros. Dejan, quizás, recuerdos, pero mientras que una sola persona interviene en la vida de decenas de individuos, la vida de un perro es prácticamente inconsecuente salvo para aquellos que compartimos techo con él.

Mi perro llegó a mi casa dos meses después de que yo cumpliera trece años. Por lo tanto, he vivido más tiempo a su lado que sin él. Era más viejo que todas mis amistades, que casi todos mis objetos: que mi coche, mi computadora, mi teléfono y mi colección de DVD´s. Tengo recuerdos concretos suyos, muchos más de los que tengo con personas a las que conozco por casi el mismo tiempo. A pesar de que era un animalito de siete kilos, su personalidad me quedaba clara. Era un hosco irredimible, un perro de cariños muy particulares; nervioso, digno y leal. No quiso a muchas personas en su vida. Quiso a mi mamá, me quiso a mí y creo –porque se la pasaba mordiendo sus patas traseras- que quería al labrador con el que compartió un jardín por doce años. Un perro ama porque sí, y a cambio solo recibe cobijo, un plato de croquetas y agua. Te ama, quizás, porque sabe que lo escogiste, que entre todos sus hermanos lo tomaste desde adentro de una caja de cartón para llevarlo a tu casa. Por eso me senté a su lado, un día antes de que lo durmieran, y no supe qué otra cosa decirle más que gracias. Me agaché, besé la diminuta cabeza de ese anciano adolescente y le agradecí que me quisiera así a cambio de prácticamente nada. He sido mucho más atento con personas que me han querido mucho menos, así que ese gracias era, también, una disculpa por no haberlo acariciado más, por haber jugado nintendo en vez de salir al jardín a acompañarlo, por no haberlo querido a él como él me quiso a mí.
Llegó su acta de cremación y su nombre venía mal escrito. Lo tomé con filosofía. Después de todo, ¿a quién después de mí le puede importar mi perro? Y no tendría por qué ser de otra manera: él tampoco quiso a muchos más. Ese pequeño guardián que me vendieron como schnauzer a pesar de que claramente venía de la calle, fue todo mío. Fue el final de mi infancia y toda mi adolescencia. Fue mi bienvenida de la escuela, mi adiós antes de un viaje y el ruido que me arrullaba a la hora de dormir. Se fue y me dejó todo eso: un corazón hinchado de recuerdos impolutos, sin un solo agravio, sin una sola pena. Solo para mí y para los pocos que lo quisimos. Y con eso me basta.
Daniel Krauze

6/6/16

LA FUNCION ENERGETICA DE LOS PERROS



Estos seres maravillosos que en verdad parecen ser el “mejor amigo del humano”, no sólo son animales que sirven para cuidar o acompañar, su existencia tiene un sentido más profundo (como cada cosa en cuanto existe).
Antes de decir su función, vamos a hablar de su origen y otros detalles. Se dice que los perros provienen de los lobos, en efecto comparten similaridades genéticas, pero la variación tan distinta entre los canes, nos lleva a pensar que hay algo más allá de una simple “domesticación”.
Algunos mencionan que los perros son seres que fueron enviados de las estrellas para ayudar al ser humano en su aprendizaje sobre el amor incondicional. Esto no es imposible, considerando el hecho de que un “simple” metal como el oro, según estudios recientes, fue traído por meteoritos a la Tierra hace millones de años. En efecto, el cuerpo del perro ha nacido en esta dimensión física, sin embargo, la energía que corre en él, no necesariamente es de aquí. Podríamos pensar que el perro es un ser menos evolucionado, sin embargo, esto es una ilusión de nuestro juicio. La evolución no es proporcional al intelecto, ni a la funcionalidad social; la evolución es un tema del alma y el espíritu. ¿Cuántos humanos aman como el perro lo hace con su prójimo?, eso, es evolución, aunque no haya una complejidad intelectual. Con esto no se quiere decir que el humano sea menos involucionado, pero, el perro es maestro del humano en lo que al amor incondicional respecta.
De acuerdo al sistema energético de los perros (chakras), el plexo solar y el corazón son la zona más amplia en ellos. Son seres receptores de energía. Ellos vienen a proteger energéticamente a su compañer@ human@. Por eso es tan común que súbitamente un perro se enferme, o que si su amigo humano esté en riesgo lo presienta, o que tras la muerte del humano, él se deje morir. Porque vienen con una misión y aunque creamos que uno es quien encuentra al perro, es al revés; estos llegan en los momentos indicados, se nos aparecen en la calle y buscan quedarse con nosotros (si es el caso), o simplemente a través de la sincronía llegan a nuestras vidas. El humano puede creer que “escoge” al perrito, pero él a través de su mirada nos “reconoce” y eso hace que cerebralmente se active la “zona de empatía” y decidamos “quedarnos” con él.
Los perros vienen a enseñar el amor incondicional, no juzgan, no critican, no se ofenden, no almacenan rencor, resentimiento, molestia o tonterías así. El perro perdona, ama, juega. Si lo abandonamos o maltratamos, comienza a aflorar más la parte genética de su estructura primitiva de “lobo”, se hacen agresivos, desconfiados, etc, pero el cariño y el cuidado (aunque lleve tiempo) los regresa nuevamente a su vibración natural de amor incondicional.
En el plano de la energía, como ya se dijo, son receptores. Ellos gozan de extra-sensorialidad, perciben no solamente si alguien quiere físicamente dañar a su compañero humano, sino energéticamente, así que reciben la energía primero para que no nos afecte a los humanos. Cuando el humano tiene patrones emocionales o hábitos malsanos, el perro comenzará a trabajar con esa energía, y no solamente con el miembro más apegado de la familia, sino con toda la familia. Por eso es importante darles mucha agua (para que transmuten la energía) o llevarlos a reiki (para liberarlos de cargas energéticas innecesarias).
El ser humano cuando duerme, entra en otras frecuencias, al igual el perro. Tenemos desdoblamientos o viajes, (astrales o etéricos). El perro más que nada es un guardián en el plano astral, y puede ser diferente a como es en este plano físico. Probablemente asumirá alguna forma que nuestra mente reconozca para que no temamos y nos sintamos seguros, o simplemente estará como “observador”, cuidando nuestro campo energético. Existen casos documentados en los que en casas cargadas muy negativamente, el perro no quiere entrar, y si entra, muchas veces muere porque recibe todo el impacto energético. (Este ejemplo lo podemos ver en la película “El conjuro”).
Su constante jadeo, recicla la energía alrededor, absorbe y depura (de hecho, es su manera de transpirar; no olvidemos que el sudor es una manera en como el cuerpo saca toxinas). Obviamente este ejemplo hace referencia al jadeo cuando no es por cansancio, sed o ansiedad.
El continuo movimiento de su cola, activa y potencia sus primeros chakras (base y sacro), aumentando el campo vibratorio de la persona. En estos chakras es donde reside la fuerza vital y la percepción extra sensorial (no confundir con “tercer ojo”). Un perro siempre va a elevar la frecuencia emocional del ser humano.
Los perros viven en promedio 8 veces menos que el humano, esto es porque como ya se dijo, vienen a una misión determinada. Nuestro cuerpo se regenera en ciclos de 7 a 10 años, muy similar al promedio de vida de un perro. Nos acompañan, nos ayudan a elevar la frecuencia emocional, a comprender el amor incondicional, a transmutar la información celular, a sanar, etc.


La razón energética del aullido del perro es porque su sensibilidad logra detectar vibraciones “negativas”, “densas” y entonces da aviso de ello (inclusive puede percibir sucesos en otras partes del mundo, o eventos que apenas van a ocurrir). Es común que muchas personas digan que antes de grandes sismos, por “coincidencia” sus perros aullaban constantemente y/o estaban intranquilos.



El perro goza de existencia multidimensional. No sólo el humano es multidimensional como lo mencionan algunos científicos estudiosos del campo de la energía, también el perro. Es por ello que sienten cuando algo le ha sucedido a su compañer@.Por “estética” se les suele cortar la cola y las orejas, esto es equivalente a mutilarlos en el plano energético (aunque se recuperan), es totalmente innecesario hacerlo. En las orejas está el chakra coronario (encargado de la conexión cósmica), por eso son como sus “antenas”. Y en la cola, como ya dijimos, está la fuerza vital. De verdad, no hay que continuar con estas prácticas, no es necesario.

Adoptar un perrito es de las acciones más nobles que pueda haber, “comprarlo” es una manera de conectar con quienes están destinados a estar en nuestra vida, sin embargo, el vender seres tan maravillosos, colocarles un precio, los cosifica, se les compra y después se les menosprecia y abandona. Solo si vendieran en millones de dólares a los perros sería positivo, solo así se comprendería simbólicamente su verdadero valor. Esto no quiere decir que no haya criadores responsables, apasionados por los canes, que los amen y que su intención no sea lucrar, sin embargo, estamos hablando de un porcentaje muy bajo. Lo mejor es adoptar. Tal vez alguien podría pensar que si los perros recogen energía negativa, pudiera ser esta la causa del por qué en algunas zonas se acumulan tantos callejeritos, y en efecto, están en lo cierto, pero darle una vida mejor a estos perros, es un acto que por ser desde el amor, genera un campo de alta frecuencia en el lugar en el que se les recoge, y esa “semilla de amor” sigue ahí vibrando, como una serie de ondas generadas cuando cae una piedra en el agua.
Por último, hay que mencionar que cuando el perro se “va” de su cuerpo, sigue aquí, en una dimensión más sutil, pero siempre acompañará a su compañero humano. No solo son leales en vida, sino después de cumplir su misión en la Tierra. Esto se ha comprobado mucho en sesiones de reiki, mientras la persona está en la camilla, algunos terapeutas han llegado a verlos cuidando a su compañero humano.
-Nadim David

19/5/16

THE STORY ABOUT MARTHA, PAUL MCCARTNEY´S SHEEPIE



In October of 1968, The Beatles recorded the Paul McCartney penned “White Album” song “Martha, My Dear”.  At the time, most people assumed McCartney was indirectly singing a message of love to his longtime girlfriend, Jane Asher who had just broken off their engagement a few months earlier.
Paul McCartney Jane Asher Martha My Dear English Sheepdog White Album
Funny thing is McCartney was actually not signing about his ex-girlfriend Jane but rather to the other subject in the photo above, his beloved English Sheepdog “Martha”.
Paul McCartney's Dog Martha The Beatles
Here’s the history of “Martha” who is included in thousands of photos with McCartney and withThe Beatles. Soon after buying his house on Cavendish Avenue, Paul McCartney bought his first pet, an Old English sheepdog puppy that he named Martha.  She was born June 16, 1966.
Martha My Dear Paul McCartney Dog Cavendish
About MarthaPaul said,
“She was a dear pet of mine. I remember John (Lennon) being amazed to see me being so loving to an animal.”  He said, ‘I’ve never seen you like that before.’ I’ve since thought, you know, he wouldn’t have.  It’s only when you’re cuddling around with a dog that you’re in that mode, and she was a very cuddly dog.”
Here’s a really cool photo of Lennon and McCartney walking ‘Martha”.
john_lennon_paul_mcCartney_walking_dog_martha
Check out “Martha” on the set of The Beatles “Strawberry Fields Forever” video shoot.
Martha The Dog The Beatles Paul McCartney
In 1997, McCartney confirmed that “Martha” the dog had been the inspiration behind the song “Martha My Dear“.  It’s a communication of some sort of affection but in a slightly abstract way,McCartney said,
‘You silly girl, look what you’ve done,’ all that sort of stuff. These songs grow. Whereas it would appear to anybody else to be a song to a girl called Martha, it’s actually a dog, and our relationship was platonic, believe me.”
Paul McCartney's Dog Martha My Dear
McCartney also said,
“When I taught myself piano I liked to see how far I could go, and this started life almost as a piece you’d learn as a piano lesson. It’s quite hard for me to play, it’s a two-handed thing, like a little set piece. In fact I remember one or two people being surprised that I’d played it because it’s slightly above my level or competence really, but I wrote it as that, something a bit more complex for me to play. Then while I was blocking out words – you just mouth out sounds and some things come – I found the words ‘Martha My Dear‘.”
Paul McCartney Dog Martha My Dear
Martha died in 1981 at the age of 15 at McCartney’s farm house in Mull of Kintyre, Scotland.  She is survived by her offspring, one of which was featured on McCartney’s 1993 album “Paul Is Live” album cover.  Her name is Arrow.
Paul Is Live McCartney Dog Martha Arrow